No sé si mi habitación representaba una metáfora del estado actual de mi vida pero bueno el caso es que rara vez la he llegado a tener tan desordenada como estos días. Un auténtico caos, a saber si mi habitación es el epicentro de algún terremoto o huracán como me preguntó IkerPiker… Y si a eso añado que llevo unas dos semanas sin luz en la habitación porque se ha fundido la bombilla y no me he dignado a cambiarla pues llegamos fácilmente a la conclusión de que soy un auténtico desastre.
Hace unos instantes la he ordenado, la ropa ha vuelto al armario, los libros a las estanterías, los cds encima de otros cds, la cama esta hecha… etc etc… ¿nuevo rumbo en la vida también? Pseee… casi que va a ser que no… Se me acaba el contrato en el curro, de momento, no me renuevan (tras dos años y medio estando allí ya les vale) y encima los exámenes me están yendo de puta pena (bueno, como siempre…).
¿El resto? Bien, gracias. Al menos el puto resfriado que llevo 3 meses arrastrando no me impide escuchar casi a todas horas este impresionante doble disco que es el “Abattoir Blues/ The Lyre Of Orpheus” de Nick Cave and The Bad Seeds. He tenido tiempo también para hacer un recopilatorio la mar de majo con temas básicamente del 2004 que me he puesto en el coche y que hace más placentero los desplazamientos automovilísticos.
Y el otro día fui a un karaoke con los amígueles del curro. Para prepararme a ser una auténtica estrella de rock (de las buenas… de las alcohólicas, depravadas, drogadas y sin compasión) volví a ver la película de Cameron Crowe “Casi famosos”. Yo hubiese querido ser una estrella del rock… pero de las grandes. No de las que se mueren de asco. Un rollo Keith Richards. Porque mira que es feo el joputa y allí estamos todos admirándolo y con un cortejo de groupies siempre dispuestas a cualquier cosa… y que coño… Keith es la parte molona de los Stones, el rockero cachondo, el que ya no se toma en serio a sí mismo, el que no intenta hacer las mismas cosas que con veinte años, el que no se pone las camisas horrendas de Mick Jagger… pero bueno me conformé con pillar un buen pedal previo y luego cantar como los dioses… Yo creo que canté extremadamente bien pero claro… quizás fuese porque iba extremadamente taja… de hecho, ni me acuerdo que canté… gajes del oficio… nos ocurre a todos los buenos rockeros…

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oasis – rock'n'roll star